REFUGIOS Y ASECHANZAS DE LA MÚSICA

Si pudiera señalarse una sola certeza entre todas las vivencias múltiples que todos y cada uno de nosotros hemos estado acumulando —o incluso experimentando por vez primera— en estos días de absoluto desconcierto es precisamente la influencia tan distinta que sobre nuestro espíritu puede ejercer la música. En situaciones extremas a lo largo de la historia, la música, tan variada, ha venido siendo un bálsamo: Bach como sublime excusa para tomarse una tregua en la carnicería de Stalingrado de 1943, o el modo de evadirse hacia los cielos más allá de las alambradas cuando la libertad ha sido puesta en tela de juicio por los motivos más espurios; de este modo nació el célebre y conmovedor Cuarteto para el fin del tiempo de Olivier Messiaen, compuesto para clarinete, y estrenado en 1941 en el campo de prisioneros de Görlitz. En otras ocasiones, la música acarreaba el sentimiento del mal, como cuenta Simon Laks que sucedió en aquella Navidad de 1943 en que en Auschwitz, y en un curioso arranque de generosidad, el comandante Schwarzhuber dispuso que se interpretaran canciones navideñas polacas y alemanas para las enfermas del hospital de mujeres del campo de concentración: las mujeres empezaron a llorar, increparon a los músicos y les pidieron que pararan de tocar y que las dejaran morir solas y en paz. La orquesta se retiró abatida y en silencio. 
Terezín / Theresienstadt, con la hermosa voz de Anne Sofie von Otter (Deutsche Grammophon, 2007), es un bonito disco que, frente al sentimiento de odio hacia la música, intenta recrear precisamente la visión contraria: la de la salvación en el ejercicio creativo e interpretativo del arte. Estamos ante lieder, canciones de cabaré, sonatas… de músicos del entorno del campo checo de Terezín, que en muchos casos fueron ejecutados allí o que murieron en desplazamientos posteriores a otros campos. Otter canta con emoción, pureza y brillantez. Existe una versión posterior de 2013 grabada en vivo, que incluye además un dvd con el reportaje Refuge in music. Aquí puede escucharse una preciosa nana de Ilse Weber: https://youtu.be/vNMziun2QMA