EN EL AMOR COMO EN LA GUERRA

Amore di Marte.
Obras de Monteverdi, Marini y Bertali.
Accademia del Piacere
Mariví Blasco, soprano
Juan Sancho, tenor
Lambert Climent, tenor
Fahmi Alqhai, dirección

Alqhai&Alqhai 2011. 65’27’’
Se encuentra en www.diverdi.com


Amore di Marte es un no-va-más, una apuesta a par o impar, a todo o nada, dentro del ámbito de la música antigua. El Combatimento de Tancredi e Clorinda (tan conmovedor que se cuenta que hizo saltar las lágrimas de los nobles que escucharon por vez primera el encuentro a muerte entre los dos amantes que tras sus armaduras se desconocían) o el Lamento Della Ninfa monteverdianos constituyen una prueba de fuego muy difícil de superar, porque aparte de ser obras mayúsculas, ha sido grabadas, y muy bien grabadas, en varias ocasiones. Por no decir que tal vez el Combatimento de Gabriel Garrido y el Lamento de Claire Lefilliâtre (son mis preferidas) suponen en sí mismas cimas de la música de todos los tiempos cuya presencia en toda discoteca, aparte de indispensable, dejan el listón tan alto (esas que suelen llamarse “grabaciones de referencia”) que resulta complejo asomarse a ellas sin cautela.
Los Alqhai, bien conocidos por sus magníficos discos precedentes, en los que se han caracterizado por tensar las cuerdas de la interpretación historicista más convencional, aportando un toque en cierto modo “étnico” (bien entendido), fresco y personalísimo a cuanto han abordado, vuelven a la carga con este disco en que se predica la estrecha relación entre esos duros campos de batalla que son la Guerra y el Amor, pero sobre todo la rendición de aquella ante este último. Un disco apasionado, pues, por fuerza mayor, en el que no sólo está presente Monteverdi, aunque predomine claramente, sino también un par de sonatas del muy grande Biagio Marini y así mismo de Antonio Bertali. La Accademia del Piacere presenta un excelente trabajo en el que tal vez late demasiado el corazón (el Lamento de Mariví sigue la pauta marcada por el cremonés de “ajustarse al interior y no a la mano”, aunque quizá en exceso) pero que en conjunto resulta coherente en concepto, atrevido en interpretación y cuidado en voces e instrumentación.