Hopkinson Smith, laúd renacentista (seis órdenes)Naïve, 2008. 1h 8’
Distribuye: Diverdi
Hablar de Hopkinson Smith es hablar de una persona sumamente afable y sencilla, de un profesor didáctico al extremo (cualquiera que haya asistido a alguno de sus conciertos sabe que lo explica todo antes de ejecutar cada pieza) y, sobre todo, de un intérprete excepcional, que además ha constituido directa inspiración y referencia para toda una serie de laudistas jóvenes de innegable calidad. Smith se ha interesado durante décadas por la música española, también por la alemana, la italiana, la inglesa y la francesa, en un repertorio que abarca desde el Renacimiento al Barroco e instrumentos como la guitarra barroca, la vihuela y el laúd.
En esta ocasión, Smith se vuelve nuevamente hacia la Italia del Renacimiento, ocupándose de la obra de Francesco Canova da Milano, al parecer apodado “el Divino” por sus virguerías e improvisaciones al laúd. Tablaturas, recercares, fantasías y danzas constituyen el cuerpo de este disco sobre el que Hopkinson Smith derrama toda su sabiduría y madurez, logrando pasajes extraordinariamente intensos en su introspección. Deben destacarse también las reconstrucciones que el maestro Smith hace de algunas de las piezas a partir de los recursos habituales de Milano, así como la inserción en el repertorio de algunas piezas anónimas (tal vez de Pietro Paolo Borrono) y de Alberto da Mantova.
La música de Milano es de innegable belleza y hasta modernidad, pero cobra un especialísimo intimismo en la interpretación de Smith, quien no se conforma con efectuar una lectura limpísima, precisa, impecable, que roza lo forense: el laudista penetra en la música, dialoga con ella y desvela ese diálogo al oyente atento. De todo ello resulta un disco para escuchar sin prisa y recuperar el sentido profundo del tiempo, un disco para sumergirse en la bruma memoriosa del siglo XVI y olvidar por una hora el sinsentido del mundo que hoy vivimos. En esta ocasión, Smith se vuelve nuevamente hacia la Italia del Renacimiento, ocupándose de la obra de Francesco Canova da Milano, al parecer apodado “el Divino” por sus virguerías e improvisaciones al laúd. Tablaturas, recercares, fantasías y danzas constituyen el cuerpo de este disco sobre el que Hopkinson Smith derrama toda su sabiduría y madurez, logrando pasajes extraordinariamente intensos en su introspección. Deben destacarse también las reconstrucciones que el maestro Smith hace de algunas de las piezas a partir de los recursos habituales de Milano, así como la inserción en el repertorio de algunas piezas anónimas (tal vez de Pietro Paolo Borrono) y de Alberto da Mantova.
Comentarios
Es un maestro completísimo. Todo un señor.
Saludos,
The Dark Knight